El dichoso fútbol me tiene sujeto a la televisión desde hace semanas. Nunca dejaré de sorprenderme a mí mismo. Seguro que muchos de los que me conocen no dan crédito a mis palabras, pero si: me encuentro enganchado al deporte rey. He abandonado mis funciones domésticas, desatendido mis obligaciones, arrinconado este mismo blog, cancelado citas e incluso pasado por alto más de una comida, y todo por ver este mundial. Es que yo creo que incluso me he tragado algún Eslovaquia-Corea del Norte sin respirar. Buf!!!


Si yo fuese famoso e importante saldría en la tele y hablarían de los daños colaterales de ser un emigrante. Como no lo soy, para empezar no saldré en la tele, y sólo dirán si es que alguien dice algo, que me aburro en este país.


Pero... no, no me aburro lo más mínimo, bueno, lo más mínimo sí, pero poco más.


Un video: A ver si los señores músicos toman ejemplo de lo que es estar en las tablas. Magníficos Mink DeVille. Live en Montraux Jazz Festival en 1982. Joder, como molan estos festivales de jazz!! Un Spanish Stroll sudado de verdad: Gigantesco Willie DeVille!!!!!!